La popular cantante argentina Mercedes Sosa, “La Negra”, quien falleció este domingo a los 74 años, se consagró en escenarios internacionales con su prodigiosa garganta en más de 40 años de carrera artística, que no aisló de un fuerte compromiso político, que la llevó al exilio en la dictadura (1976-83).
Aquejada por problemas de salud que la alejaron en varias ocasiones de los escenarios en los últimos años, en 2009 lanzó el album doble “Cantora”, en el que grabó junto a prestigiosos músicos como Caetano Veloso, Joan Manuel Serrat, Joaquín Sabina, Charly García, Gustavo Cerati, Leon Gieco y Shakira.
“Nunca pensé en cantar para vivir”, dijo en una entrevista reciente, quien se convertiría en una de las voces más representativas del cancionero popular argentino y de América latina, con más de 40 discos grabados a lo largo de su carrera. Entre las canciones con las que se ha destacado en el cancionero latinomericano se encuentran “Canción con todos”, “Alfonsina y el mar”, “Gracias a la vida”, “La maza” y “Duerme negrito”.
Sus primeros pasos artísticos los dio en la década del 60 junto a su esposo, el músico Manuel Oscar Matus, sumándose al movimiento Nuevo Cancionero, que renovó el folclore. En esas épocas grabó su primer disco, “Canciones con fundamento”, en forma independiente.
Aquejada por problemas de salud que la alejaron en varias ocasiones de los escenarios en los últimos años, en 2009 lanzó el album doble “Cantora”, en el que grabó junto a prestigiosos músicos como Caetano Veloso, Joan Manuel Serrat, Joaquín Sabina, Charly García, Gustavo Cerati, Leon Gieco y Shakira.
“Nunca pensé en cantar para vivir”, dijo en una entrevista reciente, quien se convertiría en una de las voces más representativas del cancionero popular argentino y de América latina, con más de 40 discos grabados a lo largo de su carrera. Entre las canciones con las que se ha destacado en el cancionero latinomericano se encuentran “Canción con todos”, “Alfonsina y el mar”, “Gracias a la vida”, “La maza” y “Duerme negrito”.
Sus primeros pasos artísticos los dio en la década del 60 junto a su esposo, el músico Manuel Oscar Matus, sumándose al movimiento Nuevo Cancionero, que renovó el folclore. En esas épocas grabó su primer disco, “Canciones con fundamento”, en forma independiente.
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