El cáncer es un proceso de crecimiento y diseminación incontrolados de
células. Puede aparecer prácticamente en cualquier lugar del cuerpo. El tumor
suele invadir el tejido circundante y puede provocar metástasis en puntos
distantes del organismo. Muchos tipos de cáncer se podrían prevenir evitando la
exposición a factores de riesgo comunes como el humo de tabaco.
Además, un porcentaje importante de cánceres pueden curarse mediante
cirugía, radioterapia o quimioterapia, especialmente si se detectan en una fase
temprana.
La prevención y la detección temprana son fundamentales para detener el
alarmante aumento de la incidencia de esta enfermedad. Más del 60% de los casos
se concentran en África, Asia, América Central y del Sur. Esas regiones
registran el 70% de las muertes a nivel global, principalmente por la falta de
detección temprana de la enfermedad y el acceso a tratamientos.
El último Informe Mundial del Cáncer de la Organización Mundial de la
Salud informa de que en 2012 se
registraron 8,2 millones de nuevos casos y estima que esa cifra subirá a 22
millones anuales en las próximas dos décadas. Los cánceres más mortiferos son
los de pulmón, estómago, hígado, colon y mama. Los tipos de cáncer más
frecuentes son diferentes en el hombre y en la mujer.
Aproximadamente un 30% de las muertes se deben a cinco factores de
riesgo conductuales y dietéticos: índice de masa corporal elevado, ingesta
reducida de frutas y verduras, falta de actividad física, consumo de tabaco y
consumo de alcohol.
No hay comentarios:
Publicar un comentario